Los clientes, una pareja joven que nos proporcionan un edificio de dos plantas y 7×21 m de dimensiones construidos en su totalidad con medianeras en tres de sus caras, cuyo uso actual es de cochera y se encuentra en bruto.
Las necesidades de estos clientes con las de adecuar y terminar la planta baja y plantear la escalera para una futura distribución en planta primera. Uno de los requisitos fundamentales será tener cochera, aspecto que marcará el acceso principal a la vivienda.
La estructura original en planta baja se compone de pórticos metálicos con vigas de perfil IPE 400 cuya luz es el ancho de la parcela y 5 crujías de 4 metros aproximadamente cada una. En la segunda planta, la estructura cambia completamente, siendo esta una cercha a dos aguas de longitud total 16 metros, desarrollándose longitudinalmente en las 4 primeras crujías cuyo eje está situado a 3 metros de la medianera este.
El vacío de lo construido en forma de patio se convierte en la clave de este proyecto. La estructura existente configura el patio, que ocupa la mitad este de las crujías 3 y 4, hará que todas las estancias giren en torno a este como si del corazón de la vivienda se tratara.