Pasando de abuelos a nietos, esta bodega es el proyecto familiar de varias generaciones, que toman la decisión de mejorar sus instalaciones y llevar a otro nivel su marca y su vino ecológico, producido en las tierras que rodean su vivienda y la propia bodega.
La bodega actual es un sumatorio de naves agrícolas que se han ido adhiriendo a medida que las necesidades de almacenamiento y producción iban aumentando, pero sin un plan previo establecido.
La idea de proyecto trata de ordenar esos crecimientos descontrolados y aunarlos en un único edificio. Se eliminarán todas las cubiertas y separaciones interiores de las distintas naves quedando un perímetro exento. Los cerramientos se elevarán hasta los 4,50 metros de altura máxima que exige la normativa y se incorporará una cubierta de madera dispuesta a dos aguas.
El nuevo volumen lo entendemos como la piel de la uva que necesita de su jugo, su interior. Este será el cubo que insertamos en el centro del perímetro edificado que creará dos niveles, el inferior para los aseos y almacenamiento y el superior para la zona de cata que gracias a una apertura rectangular permitirá el disfrute de la degustación de una copa de vino con vistas a la viña.
Formando parte de este cubo situamos la zona de barrica, interior, opaca y aislada creando una atmósfera ideal para poder controlar las condiciones idóneas de temperatura y humedad necesarias para que la calidad del vino sea óptimo.